Te recuerdo como eras y como quisiste que yo fuera

El tiempo fue pasando y es cierto lo que dicen que el primer año es el mas duro. Las primeras veces de todo lo que debiera haber sucedido y no sucedió. La realidad es que toda una vida no sucedió y cada día del resto de nuestros días pueden volverse tan penosos como el del día que nos tuvimos que despedir. Como siempre digo, podemos elegir. Siempre tenemos opciones. Seguramente recomponernos será la opción mas difícil pero también la mas valiente.
Encuentro con mucha alegría fotos en facebook de mamás que nuevamente sonríen frente a la llegada de un nuevo bebe. Hemos compartido mucho en estas paginas y muchas de nosotras pudimos avanzar a pesar de tanto dolor.

Sin embargo me pasa que me cuesta, ahora que esta mi beba, reconectarme con el dolor. Muchas veces quisiera no sentirlo o borrar esa parte de mi vida para que no se me estruje el corazón al menos una vez a la semana. Pero llega esta fecha y yo quiero recordarla mas que nunca. Me esfuerzo por no olvidarme de sus rasgos, de su piel, de sentir eso que sentí cuando la sostuve en mis brazos por única vez. Tengo miedo de olvidarme como era...aunque se que una madre nunca olvida, yo trato de imaginarmela un poco como era y un poco como me gustaría recordarla. Y de tanto en tanto encuentro su ropita guardadita o veo sus juguetes en un estante tal como estaban cuando los compre. Pero lo mas importante es que a veces olvido que para recordarla no necesito nada mas que verme a mi misma. A lo que ella dejó en mi cuando partió y no es solo tristeza. Con el tiempo me fui dando cuenta que ella abrió un camino en mi corazón que permitió que yo me volviera mas humana, mas empática y que es ese el camino que tengo que seguir para no perderme. Deseo profundamente que todas las mamas del blog encuentren "su camino" para seguir recordando con mas amor que dolor.